La tendencia de reducción de la población carcelaria, iniciada hace cinco años, se mantiene. El número de condenas a penas no privativas de libertad aumentó de 34 % en un año. 
Actualmente, cuatro recursos judiciales por malos tratos o tortura en prisiones italianas están siendo juzgados por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).

La fecha límite de cierre de todos los hospitales psiquiátricos judiciales (OPG) fue fijada para marzo del 2015. Sin embargo, cuatro están aún en funcionamiento. Las malas condiciones de reclusión de los OPG son denunciadas con frecuencia, así como la falta de personal y la elevada tasa de sobrepoblación.

Italia es el país que emplea la mayor cantidad de guardias en Europa. La administración penitenciaria consagra el 85 % de su presupuesto. Los fondos otorgados al mantenimiento de infraestructuras y a los programas de reinserción no insuficientes.