En caso de arresto

Todo individuo tiene acceso a un abogado. Los detenidos extranjeros pueden beneficiar de un intérprete. Se realizan exámenes médicos previo consentimiento del detenido.

Los miembros de la familia pueden ponerse en contacto con la línea telefónica de consultas sobre reclusos o con el Departamento de Servicios Penitenciarios del estado correspondiente para averiguar dónde se encuentra detenido su familiar.

Solo las organizaciones y grupos de confianza tienen acceso a los reclusos. Se evita todo apoyo independiente.