Poblaciones específicas

Reclusas

6,9 % (672)
i
09/2016
/ ministerio de servicios correccionales

Evolución del número de reclusas

aumento de 11%

El número de mujeres reclusas se elevó a 585 en septiembre de 2015.
La tasa de encarcelamiento de mujeres es de 13,3 por cada 100 000.

Porcentaje de mujeres en prisión preventiva

29,5 %

i
09/2016
/ ministerio de servicios correccionales

Las mujeres son encarceladas en establecimientos o módulos exclusivos para mujeres.

Existen tres establecimientos penitenciarios para mujeres: la prisión de la región de Auckland, la prisión de Arohata, en Wellington, y la prisión de Christchurch.

El establecimiento de Auckland, el más grande, albergaba en diciembre de 2015 a 401 mujeres. La prisión de Arohata, la más pequeña, albergaba a 89 reclusas durante ese mismo periodo.

El Ministerio de Servicios Correccionales anunció, en junio de 2016, un proyecto para duplicar la capacidad de la prisión de Arohata y construir un nuevo edificio de alta seguridad.

Las reclusas preventivas están separadas de las penadas

Tanto el agente que procede con los registros corporales como el que acompaña deben ser del mismo sexo que el recluso.

El día de su llagada, cada reclusa recibe protectores femeninos.

Se autoriza a las mujeres a recibir visitas conyugales

la ley no prevé las visitas conyugales

Las mujeres pueden quedarse con sus hijos

Los niños de nueve meses a dos años pueden permanecer con sus madres mientras estas cumplen su condena. La edad máxima varía según el establecimiento.

Con la enmienda de la ley penitenciaria de 2008 se construyeron dos tipos de módulos para las madres reclusas y sus hijos: uno para los cuidados personales y otros para alimentar y crear vínculos. Los primeros son módulos independientes que se asemejan al de un hogar y están equipados con una pequeña cocina y una habitación para el bebé. Los segundos son para las madres cuyos hijos están bajo el cuidado de otra persona. Allí pueden permanecer juntos hasta por doce horas diarias.

La legislación prohíbe el encarcelamiento de los menores

no

Edad a partir de la cual un menor puede ser encarcelado

10 años

La responsabilidad penal de los menores está establecida a los 10 años. Los jóvenes de 17 años son juzgados como adultos.

Los menores de los 10 a los 13 años pueden ser condenados por homicidio o asesinato. Los menores de los 14 a los 16 años pueden serlo por homicidio, asesinato y delitos que den lugar a un juicio ante jurado.

Menores reclusos

3,7 %

(menores de 20 años)

i
09/2016
/ ministerio de servicios correccionales

Ministerio responsable de los menores infractores

  • Ministerio de Justicia
  • Ministerio de Desarrollo Social

El sistema de justicia juvenil regula las dos categorías : el proceso de la niñez infractora (de 10 a 13 años) y el proceso de justicia de menores (de 14 a 16 años).

La ley prevé el internamiento en centros educativos como sanción para los menores.

También prevé penas de prisión. El Departamento de Justicia de Menores de Nueva Zelanda recurre al encarcelamiento de los menores como último recurso, y las condenas suelen ser cortas. El tribunal de menores interviene solo en el 28 % de los casos.

Los tipos de establecimientos penitenciarios que albergan menores son cuatro centros correccionales para jóvenes (Youth Justice Residences), administrados por el Ministerio de Desarrollo Social, y módulos especiales para niños de 17 años.

En centros correccionales para menores, niños y niñas están mezclados para que se puedan beneficiar de los programas y actividades que ofrecen.

Las cifras relativas a los menores se publican de manera

regular

Los reclusos menores están separados de los adultos

en algunos establecimientos

A los 17 años los menores alcanzan la mayoría de edad penal, por lo que son juzgados como adultos y alojados en prisiones normales. Sin embargo, son separados del resto de los reclusos y viven en módulos especiales hasta los 21 años.

Por otro lado, el Subcomité de las Naciones Unidas para la Prevención de la Tortura señaló en su informe de 2014 que las reclusas menores no son separadas de las adultas.

La escolarización de los menores es obligatoria

no

La educación a tiempo completo es obligatoria hasta los 16 años. A partir de los 16, y hasta los 19 años, los jóvenes pueden inscribirse de manera voluntaria.

Número y porcentaje de reclusos extranjeros

1,9 % (189)
i
2016
/ ICPR

Se prohíbe la cadena perpetua

no

La cadena perpetua se aplica obligatoriamente en caso de traición. Delitos como el terrorismo, el homicidio, el asesinato y el tráfico de drogas de tipo A también están sujetos a esta pena.

Desde 1980, se han pronunciado 813 cadenas perpetuas por asesinato. Solo seis personas fueron condenadas a esta pena por otros tipos de delito, uno por homicidio y cinco por delitos relacionados con la droga.

Las personas condenadas a cadena perpetua deben cumplir un mínimo diez años de prisión antes de poder ser elegibles para la libertad condicional. En caso de ser acordada esta medida, la persona estará en libertad condicional por el resto de su vida.

27,2 %

i
30/09/2016
/ ICPR

Evolución del número de personas en prisión preventiva

-

La ley de 2013 sobre la liberación bajo fianza favorece la prisión preventiva, la que, entre 2010 y 2016, pasó de 21.6 % a 27.2 %.

Los reclusos preventivos están separados de los penados

La distinción entre un recluso preventivo y un condenado es bastante clara.

La legislación prevé la liberación bajo fianza de las personas en prisión preventiva

El sistema de justicia penal no ha establecido un periodo máximo de prisión preventiva para los menores.

El Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria denunció una “creciente tendencia” a mantener a los jóvenes delincuentes en las estaciones de policía por un largo periodo, en lugar de trasladarlos a los centros correccionales para jóvenes.

Puede resultar difícil para los reclusos obtener una liberación anticipada después de largos periodos de detención preventiva.

La pertenencia a una minoría o población autóctona es un criterio para asignar a los reclusos a una celda o un módulo determinados

Existen cinco unidades reservadas únicamente para acoger a los reclusos maoríes en Nueva Zelanda. Estas unidades, creadas a principios del año 2000, permiten responder a los problemas inherentes a la minoría maorí.

En las cinco unidades reserverdas (Maori Focus Unit), reclusos maoríes pueden asumir su identidad positivamente, adquirir competencias básicas y preparar su salida de prisión (reciben ayuda en su búsqueda de domicilio, se les brinda apoyo comunitario para facilitar su reinserción en la sociedad, etc1). Hoy en día, cada una de estas unidades acoge a un pequeño número de reclusos que se benefician de estos programas.


  1. Why are there so many Maori in New Zealand’s prisons?” en Al Jazeera, 2 de junio de 2016 (en inglés) 

El Comité de las Naciones Unidas contra la Tortura y el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria (GTDA) manifestaron su preocupación con respecto al número desproporcionado de maoríes encarcelados. Este pueblo representa la mitad de la población carcelaria, mientras que solo constituyen un 15 % de la población neozelandesa. Dos tercios de las mujeres reclusas pertenecen a la comunidad maorí.

El Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre Detenciones Arbitrarias se alarmó debido a “los constantes prejuicios contra los acusados maorís en todos los niveles del sistema de justicia penal”. El SPT mostró su preocupación por “el incremento de las demoras dentro del sistema judicial” y señaló que la detención preventiva “se utiliza regularmente y se prolonga de manera excesiva1

Los investigadores evocan varios factores para explicar esta elevada tasa de encarcelamiento entre la población maorí, como por ejemplo, los prejuicios socioeconómicos de los que son víctimas desde la época colonial, así como otros prejuicios que influencian las decisiones de los jueces en su contra. El profesor Warren Brookbanks declaró que esta desproporción constituye el elemento más “perturbador” de la ley de los tres golpes. De igual manera, reiteró las críticas anteriores declarando que, cuando se compara a los reincidentes con la población general, hay una representación excesiva y alarmante de maorís y de nativos de las islas del Pacífico. Esta representación excesiva es comparable con los afroamericanos en California, conforme a la ley de los tres golpes en este estado.


  1. Subcomité de las Naciones Unidas para la Prevención de la Tortura CAT/OP/NZL/1, p. 9 

Se prohíbe procesar o encarcelar a una persona por su orientación sexual o identidad de género

La ley de reforma de 1988 despenalizó las relaciones sexuales consentidas entre hombres mayores de 16 años. Las relaciones entre mujeres nunca se han penalizado. La ley de 1993 sobre los derechos humanos prohibió toda discriminación basada en la orientación sexual y, de manera implícita, en la identidad de género.

Se aloja a las personas LGBTQI+ en celdas o módulos específicos

en algunos casos

La administración penitenciaria suele aislar durante largos periodos de tiempo1 a las mujeres transgéneros asignadas a las prisiones masculinas, sin tener en cuenta que este aislamiento tiene graves consecuencias sobre su salud mental.

El sociólogo Ti Lamusse declaró: “he trabajado personalmente con muchos reclusos transgéneros que me han revelado que con frecuencia son puestos en celdas de aislamiento solitario en las que permanecen 23 horas diarias por razones de seguridad. Varios textos confirman que la privación de contacto humano durante un periodo prolongado puede generar sufrimiento y pensamientos suicidas”.2


  1. Equal Justice Project, “Transgender Prisoners’ Rights Ignored” (en inglés) 

  2. Cash injection to save prisoners’ lives” en Stuff, 2 noviembre de 2016 (en inglés) 

La asignación de las personas transgénero a un establecimiento depende de

  • sus documentos oficiales
  • su sexo biológico

Desde 2014, las mujeres transgéneros pueden solicitar su traslado a una prisión de mujeres gracias a la política relativa a los reclusos transgéneros e intersexuales.

Si el personal no está seguro del género del recluso, el manual de instrucciones del personal penitenciario prevé que el sistema penitenciario decida sobre la ubicación de la persona en una prisión para hombres o para mujeres. Si la persona en cuestión posee un acta de nacimiento en la que se especifica su género, la decisión dependerá de dicha acta. Es posible apelar la primera decisión ante el director general de la administración penitenciaria.

En conformidad con la ley M.03.05.02, solo se puede denegar el traslado de una persona condenada por infracción sexual grave cometida contra otra persona del sexo que ha elegido.

En algunas ocasiones, las mujeres transgéneros son ubicadas en prisiones para hombres a pesar de que esto pone en riesgo su seguridad.

Se autoriza a las personas LGBTQI+ a recibir visitas conyugales

la ley no prevé las visitas conyugales

El grupo abolicionista No Pride in Prisons defiende los derechos de los miembros de la comunidad LGBTI detenidos.

La administración penitenciaria lleva un registro específico de los reclusos de edad avanzada

Número y porcentaje de reclusos de edad avanzada

5 %

i
09/2016
/ ministerio de servicios correccionales

Se ha abolido la pena de muerte

sí, desde 1989

La pena de muerte, que había sido eliminada para el asesinato en 1961, pero mantenida para la traición, fue abolida definitivamente en 1989. La última ejecución tuvo lugar en 1957.