Testimonio

Sunny Jacobs: la vida fuera de la prisión

¿Cómo es la vida después de la prisión?

Una serie de testimonios (3/3)

En Estados Unidos, más de 2000 condenados a muerte están en espera de ejecución. Desde 1973, la Justicia ha declarado inocentes y absuelto a una media de tres personas al año: Sunny Jacobs es una de ellas. Sunny y su esposo, Jesse Tafero, fueron condenados a muerte en 1981 por un delito que no cometieron; Jesse fue ejecutado en condiciones atroces y Sunny pasó cinco años en el corredor de la muerte, antes de que le conmutaran su pena por cadena perpetua. En total, pasó diecisiete años en prisión, hasta que finalmente fue puesta en libertad. Ahora, está casada con Peter Pringle, que también fue acusado injustamente y condenado a muerte en Irlanda.

Del aislamiento extremo al perdón y el activismo: este es el testimonio de Sunny Jacobs.

Cuando salí de prisión, nadie me daba trabajo. El estigma que pesa sobre las personas con antecedentes penales es un enorme problema.

Queremos un lugar para que las personas víctimas de errores judiciales se recuperen de su mala experiencia e intenten encontrar la paz.

Los niños no reciben ninguna ayuda, ningún reconocimiento, ¡nada!

Obtener beneficios se convierte en la prioridad, y ayudar a la gente deja de importar.