archivesarrow-backarrow-left-smallarrow-leftarrow-right-smallarrow-rightarrow-topiconGroup 6iconiconiconShapeGroup 3chevron-leftchevron-rightcross-thin-1crossicondouble-arrow-leftdouble-arrow-righticonfilegoogleplusGrouppaypalGroup 4iconGroup 8iconsubnaviconGroup 3iconicon
  • es

    • fr
    • en
    • es
  • es

    • fr
    • en
    • es
  • Hacer un donativo
  • Mi cuenta
    • Mi espacio
  • Inicio
    • Informar
    • Comparar
      • Herramienta de comparación
      • Dossiers temáticos
      • Prison Life Index
    • Testimonios
      • Testimonios
      • Inside Outside
      • Entrevistas
      • Perspectivas
      • Portfolios
    • Explorar
    • Presentación
      • Prison Insider
      • ¿Quiénes somos?
      • Colaboradores
  • es

    • fr
    • en
    • es
  • Inicio
    • Informar
    • Comparar
      • Herramienta de comparación
      • Dossiers temáticos
      • Prison Life Index
    • Testimonios
      • Testimonios
      • Inside Outside
      • Entrevistas
      • Perspectivas
      • Portfolios
    • Explorar
    • Presentación
      • Prison Insider
      • ¿Quiénes somos?
      • Colaboradores
10_gou_t_2.jpg
Volver

El gusto — 10/12

América del Norte Mujeres América del Sur Asia Europa Penas de larga duración
Publicado el 6 de octubre de 2020 Inside Outside
Índice
  • Bertrand habla a los participantes
  • Francia, Roanne
    • Estados Unidos, Schuylkill (Pensilvania)
      • Guatemala
        • Italia
          • Japón
            • Argentina
              • Francia, Arles
                • Ukraine
                  • Suiza
                    • Colombia
                      • Francia, Arles
                        • Japón
                          • Estados Unidos, Lake Placid (New York)
                            • ++
                              • El espacio — 12/12
                              • El olfato — 11/12
                              • El tacto — 9/12
                              • El oído — 8/12

                            Índice
                            • Bertrand habla a los participantes
                            • Francia, Roanne
                              • Estados Unidos, Schuylkill (Pensilvania)
                                • Guatemala
                                  • Italia
                                    • Japón
                                      • Argentina
                                        • Francia, Arles
                                          • Ukraine
                                            • Suiza
                                              • Colombia
                                                • Francia, Arles
                                                  • Japón
                                                    • Estados Unidos, Lake Placid (New York)
                                                      • ++
                                                        • El espacio — 12/12
                                                        • El olfato — 11/12
                                                        • El tacto — 9/12
                                                        • El oído — 8/12

                                                      Cada mes, el fotógrafo Bertrand Gaudillère realiza una fotografía, o la elige entre sus archivos, para que Prison Insider la envíe a los diferentes reclusos de varias partes del mundo que participan en el proyecto. Estan encarcelados en Argentina, en los Estados Unidos, en Francia, en Suiza, en Guatemala, en Ucrania, en Colombia, en Líbano, en Italia, en Japón y en Bélgica.

                                                      10_gou_t_2.jpg

                                                      Bertrand habla a los participantes¶

                                                      Ese día cumplo 41 años. Desde la ventana de un restaurante del hotel Marmara veo la noche adentrarse en Estambul. Esla primera vez que celebro mi cumpleaños en el extranjero, lejos de mis hijas. Desde lo alto de la torre que domina la ciudad, tomo algunas fotografías para recordar la intensidad del momento en el que la cocina baila en medio de las mezquitas iluminadas, y capturar un poco de esta efímera y casi surrealista belleza…La cena es sabrosa; los sabores del oriente se entremezclan con los del occidente. El gusto por otros lugares, el gusto por la novedad, el gusto por los demás…
                                                      Bertrand.

                                                      Prison Insider le propone contarnos libremente lo que le evoca, o le hace sentir, esta imagen relacionada con el sentido del gusto, desde su lugar de encarcelamiento.

                                                      Francia, Roanne

                                                      Autores : — Anne-Marie, 59 años, mujer. / Traducido por Tamara Pineiro.

                                                      Esta fotografía me inspira un sentimiento de libertad, acompañado de la emanación de fragancias y el gusto de sabores exóticos.
                                                      En mi caso, me proyecta en un viaje a lo desconocido, un cambio de aires que sin duda me sorprendería dado que no conozco Estambul. Esta imagen simboliza la noche. La buena vida en un ambiente festivo, parcialmente oscuro, en el cual se cena frecuentemente en restaurantes buenos y de categoría. Hoy hace tres meses que estoy en semi-libertad. ¡Esta fotografía es el “por-venir” para mí!

                                                      Estados Unidos, Schuylkill (Pensilvania)

                                                      Autores : — Eric, 45 años, hombre. / Traducido y corregido por Esperanza Escalona y Lina Moreno.

                                                      El miedo tiene un sabor característico

                                                      Preguntas¶

                                                      En el comedor, sujeto el tenedor de manera incorrecta y en ese momento me doy cuenta de que estoy en la cárcel. Etiqueta inapropiada… era de esperar; normas de etiqueta social inapropiadas… se desata en mí la furia. Caos, rechazado; inestabilidad, aceptada… ¿alguna pregunta?

                                                      Además, me doy cuenta de que tengo unos poderes de reflexión extranaturales. Puedo evadirme a través del gusto, o a través de la cara de un ser querido en una foto, reflejado en otro tiempo y espacio. Shhhh…, no hagas preguntas.
                                                      ¡Sí! El miedo tiene un sabor característico. Diferente en cada lugar específico. Este, oeste, derecha, izquierda, al final siempre se mantiene fresco. Pero el regusto es breve. Dulcemente repugnante, amargamente insulso. Un picante guiso de emociones y pensamientos… Vaya, ¿tienes otra pregunta?
                                                      ¡Oh! ¿No puedo llamar? ¡Tengo que llamar! Se supone que mi hija es la reina del baile. ¡No! Esto no es poca cosa. Estoy en prisión… ¡Me lo estoy perdiendo todo! Mira, si no hago esta llamada, mi hija se va a enfadar, lo que me hará buscar a alguien con quien pelearme. ¿Alguna pregunta?

                                                      ¡No! Mi vida es extranjera. A veces parece que es de otro lugar. ¡Sí! Tiene algo de novedad, pero es más como si mi mente estuviera insertada en el cuerpo de un extranjero o a veces como si la mente de un extranjero y mi mente estuvieran embutidas en mi propio cuerpo.

                                                      Sabe… ¿familiarmente extraña? El sabor de… ¿otros? ¡Oh!, ¿y ahora no tienes ninguna pregunta?
                                                      Antes de entrar en prisión, dabas por hecho que había unas ciertas normas de comportamiento en la mesa. Antes de entrar en prisión, dabas por hecho que las normas de etiqueta social eran algo insignificante. Algo que tú nunca te habías planteado. ¿Por qué?

                                                      Guatemala

                                                      Autores : — Carlos, 67 años, hombre.

                                                      Encarcelado, ruido, candados, puertas, estoy en un sótano Cuando vienen, ahí se escuchan gritos que traen muerte. Comida descompuesta, las ratas me traen carne y pan. Alguien llegó y dijo: Aproxímate a la entrada, quieren hablarte.

                                                      Hola hijo, soy sacerdote, tengo un minuto para hablarte. Dame tus generales y narra cómo sucedió el hecho por el que estás aquí.

                                                      Nombre Gumt, 65, casado, antropólogo, saudí. Tomé vuelo comercial París-Turquía, visitar a un amigo en Estambul, ir a una mezquita y regresar con mi familia. En vuelo avisaron que estábamos en emergencia. No dijeron de qué tipo. Aterrizamos normal en Turquía.

                                                      Al salir corriendo del avión, varios agentes me encañonaron, inmovilizaron pies y manos y me vendaron ojos. En ese instante vi y escuché que el avión estalló en llamas. Alguien ahí dijo: Hijo de puta, ¿ves lo que hiciste? Me golpearon a más no poder, interrogatorios, muchos. Golpizas hasta desmayar. Volví en sí, íbamos en vehículo, tras varias horas llegamos a este lugar.
                                                      ¿Cuál es tu último deseo? Libertad, muerto ya estoy.

                                                      El guardia dijo: Terminado y me disparó.

                                                      Italia

                                                      Autores : — Giuseppe, 40 años, hombre / Traducido y corregido por Lina Moreno y Domingo Aguilera.

                                                      Esta fotografía me recuerda aquellos tiempos en los que no era más que un niño lleno de expectativas. Ahora ni siquiera consigo deleitarme con el olor y el sabor de la comida, solo con el perfume de la libertad. A veces veo mi silueta reflejada en un cristal y, como por arte de magia, me encuentro sumergido en una ciudad iluminada y alegre Pero solo me dura unos pocos minutos, durante los cuales me siento libre y feliz Luego… las rejas __

                                                      Leer la versión original (en italiano)

                                                      Japón

                                                      Autores : — HV, 60 años, mujer. / Traducción y revisión: Meritxell Sayos y Lina Moreno.

                                                      Así que esto es la libertad, en la bella Estambul, Parece maravilloso desde mi posición, La oscuridad lentamente ha descendido, Las luces de la ciudad se reflejan abajo, en el agua.

                                                      Desde este restaurante muy por encima de la ciudad, Los aromáticos olores son tan tentadores, Juegan con mis papilas gustativas y se me hace la boca agua.

                                                      Me aseguraré, nunca olvidaré Esta vista, o la maravillosa comida, todo Está grabado en mi memoria Ahora comienza la vida…

                                                      Argentina

                                                      Autores : — Pablo, 36 años, hombre.

                                                      Al comer, me siento cerca de ellos

                                                      Cruzando el gran puente del otro lado , logro ver las dos mezquitas más importantes de Estambul LA AZUL Y LE EVES ,y esta imagen es muy grandiosa para mí, el mensaje que interpreto es increíble porque son muchas las sensaciones que despierta mi gusto al verla cocina en pleno movimiento y por otro lado lo que se contempla dela ciudad ,sin los riquísimos deleites que ofrece la gastronomía turca, con amplia variedades de vegetales es sabroso el gusto que despierta en mi paladar esta gran ciudad turca…

                                                      Yo hago destacar todos mis gustos aquí dentro, de la mejor manera posible. Porque, incluso en este lugar, hay comidas que todavía sigo ingiriendo que también lo hacía con mis hijos y esposa. Es por eso que cuando las elaboro, trato de hacerlas lo más parecidas posible en gusto. ¿Para qué? Para, al comer, sentirme cerca d ellos, trasladándome en mi memoria gustativa hacia el comedor de mi hogar. Es muy linda esa sensación, que no se limita solo a una comida. El gusto de mi mate es el mismo que el del que tiene mi mujer en su casa. El gusto es fundamental en mi vida; tanto como el sentido del olor o el del tacto…

                                                      Francia, Arles

                                                      Autores : — Pascal, 45 años, hombre. / Traducido por Tamara Piñeiro.

                                                      Imagino una vida totalmente opuesta a la que viví

                                                      ¡Es realmente maravilloso ver una gran ciudad, así, iluminada de noche! Se nos ofrece un panorama multicolor siempre en movimiento, un florilegio de colores. Las carreteras, con tanto tráfico, parecen grandes vasos sanguíneos ramificándose por todas partes.

                                                      Vista desde lo alto y de noche es mucho más hermosa que en la madrugada, antes de ir a trabajar con una niebla espesa y fría. Este tipo de fotografía es la que te recuerda lo que es estar privado de libertad; pero también la que te motiva para hacer todo lo posible para recobrarla plenamente y salir, por fin, por la puerta principal. Es algo que te devuelve las ganas de trabajar y de esforzarte para poder reinsertarte como es debido y llevar una vida normal.

                                                      La prisión es dura. A veces tengo ganas de dejarme llevar por la ira o la violencia, pero consigo reprimirlo rápidamente, ya que no pierdo nunca de vista mi salida y no quiero tener problemas.

                                                      He retomado gusto al estudio y a los placeres simples: el más mínimo acontecimiento positivo se convierte en una gran satisfacción.

                                                      Por ejemplo, el hecho de recibir las compras encargadas al demandadero procura un instante de dicha; cuando estaba en libertad, hacer la compra me parecía un acto banal y casi tedioso, mientras que ahora, cuando recibo los productos que he pedido, siento una felicidad que no hubiera experimentado nunca cuando era un hombre libre. Prueba de que la felicidad se adapta a todas las situaciones y de que dependiendo de las condiciones en las que uno se encuentra todo es relativo.

                                                      Actividades como la lectura o el teatro, que había dejado, han retomado un lugar destacado en mi vida ya que, aquí, para mantener un buen estado de ánimo, todo es cuestión de gusto: es primordial reencontrar las aficiones olvidadas. Cuando pienso en mi futuro, en mi salida, tengo un punto de vista totalmente diferente del que tenía antes de mi encarcelación. Imagino una vida totalmente opuesta a la que viví. Desde luego, soy consciente de que no se puede determinar qué nos deparará el futuro, pero por lo menos se puede intentar mejorarlo en lo que se pueda.

                                                      Aquí tienen, en lo que toca a la impresión que me ha producido esta magnífica fotografía, unas palabras de mi parte. Os digo hasta pronto, con la esperanza de recibir una bellísima fotografía.

                                                      Ukraine

                                                      Autores : — Denis, 37 años, hombre. / Traducido y corregido por Lina Moreno y Elena Ortega.

                                                      Señor, ¿qué estoy haciendo aquí? Quiero irme a casa, con mis familiares, con mis seres queridos. De todas maneras, la vida es efímera y en ningún lugar se está tan bien como en casa. Pues nada, está decidido, acabo lo que tengo que hacer y directamente, ¡al avión!

                                                      –

                                                      Leer la version original (ruso)

                                                      Suiza

                                                      Autores : — Inmaculada, 36 años, mujer.

                                                      Puedo sentir en el paladar los sabores de sus guisos para delicia de mis sentidos. Hay momentos que el tiempo no puede borrar

                                                      Llovía intensamente mientras, tumbada en la cama, contemplaba la imagen. La ventana estaba abierta y la humedad entraba constante e insolente y, en un desafío mudo, me enfriaba los pies. Ante la imposibilidad de dejar de pensar, he decidido plantar cara a los pensamientos y, de nuevo, me vi en un soliloquio que ni yo misma comprendo.

                                                      No alcanzo a expresar con palabras cómo me siento, supongo que será por este vacío que lo ocupa todo, que me deja muda ante mi cuaderno.

                                                      La imagen de la ciudad es como mi memoria; hay lugares oscuros, borrosos, casi intangibles y, por otro lado, hay recuerdos que, aunque lejanos, siguen iluminados, recuerdos tan vivos y tan presentes como tú, como yo.
                                                      Contemplo esa ciudad desde la distancia que me separa del mundo, desde lo alto de mi torre donde vivo este “secuestro”. Pero, aunque me han apartado del mundo, nada ni nadie puede alejarme de lo que es intrínsecamente mío, mis reminiscencias.

                                                      He pensado en ella, como de costumbre, vislumbrándola pequeña y frágil, acurrucada en los ovillos de su piel, esforzándose por alimentar una esperanza ya casi muerta. Y, en mis visiones confusas, la memoria se va desdibujando, las luces se apagan y hasta me cuesta recordar el tacto de sus manos que tantas veces me mecieron en las tardes tristes de mi adolescencia. El olor de su piel, su perfume innato, la esencia de lavanda que vestía cada día. Aún después de tanto tiempo, puedo sentir en el paladar los sabores de sus guisos para delicia de mis sentidos. Y es que hay momentos que el tiempo no puede borrar, hay recuerdos que se contemplan oscuros en el horizonte, pero hay otros que seguirán brillando a pesar del paso de los años.

                                                      Colombia

                                                      Autores : — Ricardo, 57 años, hombre.

                                                      No vaya a ser que le hagan a uno sentirse en libertad

                                                      La imagen y el texto contrastan radicalmente con la experiencia que vivimos desde una prisión. La cárcel es un lugar donde vivir por pocos o muchos años, pero la persona detenida no puede tomar sus propias decisiones, no vaya a ser que le hagan a uno sentirse en libertad. Debemos estar sujetos a unas normas estrictas y, de acuerdo a la capacidad que tengamos cada uno, entonces sí es posible construir escenarios que, aunque solo sea en nuestro fuero interno, nos hagan respirar aires libertarios.

                                                      Nosotros sufrimos una especie de atrofia, debido a las costumbres alimenticias que nos imponen. Pero hay un pequeño oasis cuando, por ejemplo, los fines de semana que nos visitan los familiares, se nos permite traer comidas preparadas en casa.

                                                      Francia, Arles

                                                      Autores : — Christophe, 43 años, hombre. / Traducido por Tamara Piñeiro y Diana Giron Silva.

                                                      Degustar todo ello, es degustar esa libertad lejana, es vagabundear fuera de los muros y sentirse un niño de nuevo.

                                                      Como una escapatoria efímera, la sorpresa de un bocado delicioso que nos transporta lejos, un sabor que reaviva los recuerdos, las imágenes y los sentimientos. Una magdalena de Proust que reviste generalmente el aspecto de un manjar mediterráneo o provenzal, un poco de esa familia teñida de sol, la calidez sobre sus cabezas y dentro de sus corazones. Degustar todo ello, es degustar esa libertad lejana, es vagabundear fuera de los muros y sentirse un niño de nuevo.

                                                      Es como un bálsamo a otro sabor más frecuente, el de las lágrimas.

                                                      Japón

                                                      Autores : — Caladel, 28 años, mujer. / Traducido por Meritxell Sayos, Domingo Aguilera y Lina Moreno.

                                                      Ese es el "sabor" que yo percibo en la noche...

                                                      Una ciudad en la oscuridad y las mezquitas iluminadas. Un paisaje urbano de noche, impregnado del aroma, del verdadero hedor del pecado.
                                                      Al no sentirme en absoluto atraída por la repostería o las especias orientales, me concentro en otro tipo de “sabor”… Manchados de vino y zumo de cereza, labios que se rozan para luego desbordar, mientras el meloso aliento perfumado por el café satura el aire y se pega a cada superficie como caramelo derretido.

                                                      La transpiración exuda y gotea de la piel cual maná salado, antes de derramarse dentro de las abiertas y jadeantes bocas, ávidas de ser picadas y mordidas. Hombros que se reposan, una espalda amasada, pieles tostándose… Profanos ritos nocturnos sazonados con el sabor de la lujuria y acentuados por los giros y deslices de una desatada lengua de wontón, bañada en coñac.
                                                      O bien, tal vez, por el ácido sabor a limón y el carnoso desenfreno de unos dedos mordisqueados, endurecidos por las callosidades, las quemaduras del sol, las marcas de bocados.

                                                      Generosos y sensuales, los dos cuerpos se mezclan, se funden y rebosan hasta convertirse en espuma, crepitando en la oscuridad, hirviendo por sus propios temores y deseo. Un “sabor” de tal intensidad que mis papilas gustativas hormiguean; recuerdos tan suntuosos y embriagadores como el vino caliente o el pudín de caramelo aderezado de Bourbon. Ese es el “sabor” que yo percibo en la noche.
                                                      Eso es lo que está esta noche en el menú.
                                                      ¡Ah! Sabores de otros, desde luego…

                                                      Estados Unidos, Lake Placid (New York)

                                                      Autores : — Tewhan, 39 años, hombre. / Traducido por Esperanza Escalona y Lina Moreno

                                                      De lo que me alimento está casi siempre hecho a la fuerza

                                                      Hotel Marmara¶

                                                      De aquí a pocos meses cumpliré 40 años. Aparentemente, a una vida de distancia de donde resido, el tiempo parece haberse detenido. Las ventanas que me permiten observar el exterior solo me muestran la horrible vista de las alambradas y millas de montañas. Porque casi todas las cárceles se encuentran en lo más profundo de la cima de las montañas. Cuando la noche cae sobre este país de hombres y mujeres cautivos, reflexiono sobre los muchos cumpleaños que he pasado encerrado lejos de mis hijos, perdido en la cautividad.
                                                      Celebración en la distancia. Nadie hace fotos, no hay belleza efímera, solo el gusto amargo de la separación. Una mezquita adorna la alfombra de plegarias de mi celda, los colores son tan bonitos como una puesta de sol. Solo cuando cierro los ojos saboreo algo diferente. Saboreo otra vida, ¡saboreo la libertad!

                                                      Atrapado en una tierra extranjera, con torres armadas dominando las instalaciones, cuando estás atrapado aquí, estás insensibilizado. Oyes poco, hablas menos, no ves nada, pierdes el tacto y saboreas la muerte.

                                                      Así, esta imagen, junto con el resto, es vista, oída, sentida y saboreada pero me recuerda todo lo que he perdido. Aquí nada es agradable. Cuando Oriente y Occidente se mezclan, no es para tentar a las papilas gustativas de alguien, son dos grupos geográficos diferentes chocando como los Titanes. Lo siento, pero de lo que me alimento está casi siempre hecho a la fuerza y mi realidad es lo más amarga que puede llegar a ser.

                                                      InsideOutside

                                                      ++

                                                      photo_12.jpg
                                                      16-12-2020
                                                      Inside Outside

                                                      El espacio — 12/12

                                                      Cada mes, el fotógrafo Bertrand Gaudillère realiza una fotografía, o la elige entre sus archivos, para que Prison Insider la envíe a los diferentes reclusos de varias partes del mundo que participan en el proyecto. Estan encarcelados en Argentina, en los Estados Unidos, en Francia, en Suiza, en Gua…
                                                      Seguir leyendo
                                                      io_image11_odorat2.jpg
                                                      06-11-2020
                                                      Inside Outside

                                                      El olfato — 11/12

                                                      Cada mes, el fotógrafo Bertrand Gaudillère realiza una fotografía, o la elige entre sus archivos, para que Prison Insider la envíe a los diferentes reclusos de varias partes del mundo que participan en el proyecto. Estan encarcelados en Argentina, en los Estados Unidos, en Francia, en Suiza, en Gua…
                                                      Seguir leyendo
                                                      image_9.jpeg
                                                      09-06-2020
                                                      Inside Outside

                                                      El tacto — 9/12

                                                      Cada mes, el fotógrafo Bertrand Gaudillère realiza una fotografía, o la elige entre sus archivos, para que Prison Insider la envíe a los diferentes reclusos de varias partes del mundo que participan en el proyecto. Estan encarcelados en Argentina, en los Estados Unidos, en Francia, en Suiza, en Gua…
                                                      Seguir leyendo
                                                      8_oui_e.jpg
                                                      10-01-2020
                                                      Inside Outside

                                                      El oído — 8/12

                                                      Cada mes, el fotógrafo Bertrand Gaudillère realiza una fotografía, o la elige entre sus archivos, para que Prison Insider la envíe a los diferentes reclusos de varias partes del mundo que participan en el proyecto. Estan encarcelados en Argentina, en los Estados Unidos, en Francia, en Suiza, en Gua…
                                                      Seguir leyendo
                                                      Volver a la lista
                                                      Compartir este contenido en
                                                      FacebookTwitterLinkedInEmail

                                                      Seguir a Prison Insider

                                                      • Twitter
                                                      • Facebook
                                                      • Instagram
                                                      • Hoja informativa

                                                      Páginas

                                                      • Prison Insider
                                                      • Nuestra metodología
                                                      • Prison Life Index
                                                      • Menciones legales

                                                      Actuar

                                                      • Hacer un donativo
                                                      • Contacto
                                                      Hacer un donativo