Entrevista

Francia: por una sociología moral de la prisión

Desde su creación hasta nuestros días, la prisión ha sido objeto de críticas.

Numerosas son las voces que se alzan para dar a conocer, criticar o denunciar lo que sucede en prisión; las conclusiones siguen siendo las mismas y las condenaciones se siguen acumulando: en 2020, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó a Francia por sus condiciones de reclusión juzgadas inhumanas y degradantes. ¿Cómo se debe plantear la crítica a la institución carcelaria? ¿Qué herramientas debemos movilizar para que se reconsidere el rol de la prisión y el sentido de la pena? ¿Se puede encontrar la solución a través de la crítica a la prisión?

La socióloga Corinne Rostaing recuenta sus treinta años de investigación sobre la prisión en su obra publicada recientemente La prisión, una institución degradante (Une institution dégradante, la prison). Prison Insider le ha formulado tres preguntas

Degradar es condenar a la persona a perder su dignidad debido a la indignidad de las condiciones de reclusión.

La organización carcelaria es totalmente defensiva: su misión principal es la seguridad y solo consiste en evitar las fugas.

Al inventar la libertad, la revolución dio a luz a su contrario. La prisión es la privación de la libertad, lo que debería justificar que se haga un uso moderado, limitado a los casos más graves.