Testimonio

Francia: la intimidad entre cuatro paredes

Las semanas pasan una tras otra, las visitas también; un pequeño vínculo entre el interior y el exterior, un ligero respiro, y unos encuentros breves, frustrantes y sin intimidad, que ponen a prueba las relaciones sentimentales y familiares. En Francia, algunos establecimientos penitenciarios disponen de espacios para las visitas íntimas y familiares (unités de vie familiale, UVF) 1. Se trata de pequeños apartamentos amueblados, de dos o tres habitaciones, en los que los reclusos pueden recibir las visitas de sus familiares y allegados, en toda intimidad, alejados de los espacios de detención.

El compañero sentimental de Céline fue condenado a diez años. Después de seis años de encarcelamiento, hizo la primera solicitud para acceder a un UVF. Tras varios meses de espera, la dirección del establecimiento le concedió nueve horas de visita en uno de estos espacios. Céline nos cuenta su experiencia.


  1. para obtener más información sobre los espacios para las visitas íntimas y familiares (UVF), consulte el sitio web del OIP- sección francesa (en francés)

Sin permiso de salida, es la única manera que nos queda para pasar un momento juntos.

Se escuchaba todo lo que pasaba al exterior: las puertas que se cerraban, las alarmas, las llaves que giraban en la cerradura de las puertas…

La justicia que te ha condenado a ti, me ha condenado a mí a esperar tu liberación para volver a ser una mujer.